Perdámonos
18 marzo 2013
Perdámonos, perdámonos más allá todavía,
en las lomas de las piedras de bronce,
en las montañas negras de septiembre,
en cuyas hondonadas
pronto alcanzarán los chopos sus hogueras.
Perdámonos, o deja que me pierda
en ti, o acaso tras las tapias,
también de bronce,
de ese mínimo huerto.
Detrás veo un nogal
y a su sombra hallaríamos
tu paz y la mía.
Llévame, o tráeme, o piérdeme
por esta amarga y dulce tierra nuestra,
pero este anochecer del verano moribundo
no me saques del laberinto sin salida
de tus ojos.
Antonio Colinas
No comments yet